Artículo exclusivo para América Retail
Por Aldo Myrick, Director Ejecutivo de eHunting LATAM
La Transformación Digital trae consigo importantes efectos en las empresas a nivel operacional, de eficiencias y productividad. Existen numerosos estudios que validan sus efectos en la reducción de costos y aumento en las ganancias. Pero al hacer una reflexión más profunda la pregunta que surge es, ¿cómo impacta la transformación digital en la economía real?
La nuevas oportunidades de negocios que surgen de la transformación tienen un claro impacto en el emprendimiento y el empleo. Además, mejoran la forma en que los ciudadanos interactúan con el gobierno, y la provisión de servicios públicos como educación y salud. A largo plazo, estas mejoras facilitarán además la comunicación e inclusión social.
Sin embargo, los efectos cuantificables a nivel agregado se perciben más lentamente que a nivel empresarial y son más difíciles de calcular, ya que implican nuevas metodologías aún en desarrollo. No obstante, recientemente Microsoft e IDC, realizaron un estudio sobre el impacto específico de la transformación digital en el sector manufacturero sobre el PIB de Asia Pacífico (“Unlocking the Economic Impact of Digital Transformation in Asia Pacific”), en el que se entrevistó a 1.560 líderes de la industria manufacturera en 15 países de la zona.
El estudio concluyó que si el sector manufacturero adoptase la transformación digital como estrategia de desarrollo lograría crecer un 1% extra cada año y podría generar US $387 mil millones extra en el PIB de 2021. Para esto, el sector debiera considerar el uso de datos como un activo e invertir en big data, inteligencia artificial, tecnologías cognitivas, robótica y soluciones de IoT.
Si bien el estudio está dirigido al sector manufacturero, es plausible pensar que si consideramos todos los sectores productivos, el impacto de la transformación digital en la economía y en el PIB podría ser mayor, especialmente en América Latina, donde los países están en las etapas preliminares de la digitalización de sus economías.
Así, los países que promuevan el desarrollo de una agenda de trabajo que fomente la innovación, disrupción y transformación digital en el aparato público y privado serán capaces de lograr una matriz productiva tal que sus efectos se verán en la salud y crecimiento potencial del país.